Para quién no sepa de lo que hablamos, el USB Killer 2.0 es una memoria USB que puede destruir un ordenador por completo con sólo conectarla al aplicar una corriente eléctrica elevada a los componentes internos, aplicándole a este unos 220 voltios. Un informático ruso, bajo el seudónimo de Dark Purple, ha sido el responsable del trabajo. La manipulación del voltaje negativo suministrado a través del puerto USB del ordenador era la clave de su diabólica invención.
Otra de las «peculiaridades» es que deja el equipo KO en muy poco tiempo. El propio Dark Purple ha colgado un vídeo en forma de prueba de concepto donde vemos actuar a USB Killer version 2.0 sobre un portátil Lenovo Thinkpad X60 comprado para la ocasión. En poco más de tres segundos deja al equipo inservible:
También hay casos por la red de equipos que llegan a arder quemando todos los componentes del equipo con tan solo insertarle el USB Killer.
Con esto nos queda más que claro que la próxima vez que encontremos un pendrive tirado por la calle será mejor que nos preguntemos si realmente vale la pena correr el riesgo. El precio de las memorias ha caído tanto que no compensa jugársela con algo desconocido que hemos encontrado en cualquier lugar.
